Sonriendo de nada

Se consumió todo lo que había en la mesa, marcado para compartir, en el caso que alguien quisiera compartir. Al finalizar cerró los ojos y su nariz aún sentía la picazón. Tomó del pico de la botella y se limpió la boca del mal gusto. Miró a los presentes, en cuerpo, y se echó hacia atrás esperando el golpe de gracia. Prende un cigarrillo. Lo fuma lento, mira a la nada, y estorba a su compañera que, sin parar, arremetía sobre su bragueta buscando una erección así podían consumar una penetración sobre el suelo del living, a la vista de todos, los presentes en cuerpo. Él intentó bajarse hasta las rodillas el pantalón, pero ella seguía intentando concentrarse en su pene, mientras lo acariciaba y le hablaba de labios pintados. Ambos terminaron en el suelo. Ella se reía y tomaba de la misma botella. Los demás solo esperaban la hora, cualquiera, pero esperaban pacientes la llegada. Ella se bajó sus bragas, se sacó al ropa interior, se acariciaba lentamente toda. Se reía y él era feliz en es...